martes, julio 22, 2008

Riesgo

Nunca jugó, por temor a ensuciarse o lastimarse. Nunca se enamoró, por temor a que lo hicieran sufrir. Nunca voló ni navegó, por temor a que el avión cayera o el barco naufragara. Construyó una caparazón, invisible pero efectiva, para protegerse de todo. El tiempo acarreó soledad y aburrimiento. Vio pasar a la Muerte muchas veces. Pero ella nunca se le acercó. Ya era muy viejo cuando decidió preguntarle si su hora estaba cerca. Estaba solo, con frío, el cuerpo le dolía por todos los costados, y hacía mucho que nada parecía tener sentido. La Muerte lo miró con sorpresa. - No puedo llevarte – dijo- solo vengo por los vivos... Y partió, sola.

7 comentarios:

Anónimo dijo...

'Construyó una caparazón, invisible pero efectiva, para protegerse de todo'

Muchos hacemos esto sin darnos cuenta, por suerte tu cuento va a servir para abrir muchos ojos,

Saludos

Antonio dijo...

He encontrado una relación clara entre tus tres últimos cuentos (aunque quizá esté yo demasiado pegajoso, ja ja):
Tu nieta es creadora, se arriesga (tercero), como el demiurgo de la pajita (segundo), porque no actuar, —no mancharse, como dijo el poeta—, es morir (primero).

Gracias, Olga, por la calidad de tus historias

Mónica dijo...

hola vine a conocerte a ti y a tu blog y quedé maravillada!!!

Este relato/cuento que acabo de leer es espectacular.

Nos vemos. Bsss.

Olga A. de Linares dijo...

Gracias a todos por sus comentarios, me alegra muchísimo que los hagan, y que les haya gustado lo que aquí publico. Un abrazo general

Sonia Betancort dijo...

Felicidades! Un saludo

Viviana dijo...

Brillante Olga, casi un cuento Sufí
El retorno de las Musas (Quiero más de esta comida)
Un abrazo, dos-
Vivi

Olga A. de Linares dijo...

Vivi, ojalá las musas sigan soplándome cosas en la oreja...
Mónica, muchísimas gracias por tu visita y tu comentario. Espero que vuelvas... Abrazo grande para todos